Un año más ya llegó, ya está aquí, se acerca San Valentín. ¿Quedaré fatal si digo que tanto "amor" me sube el azúcar hasta niveles imposibles? Quizá, cual político bocazas, debería matizar mis palabras: no es que me oponga al amor, al contrario; simplemente me resisto a creer que los ositos de peluche con enormes corazones que engalanan nuestros centros comerciales sean reflejo del amor. ¿por qué tengo que demostrarte que te quiero el día 14 y no también el 13 o el 5? Tengo la sensación de que cada año escribo lo mismo, y es posible que así sea... En fin, que viva el amor, pero el de verdad, el que no necesita corazoncitos de cartón. ;)
recuerdo una vez que regalé una rosa, 14 euros mediante, a una chica. Fue hace muchos años, quizá porque era la primera vez que me gustaba alguien de verdad.
ResponderEliminarpero, desde luego, los últimos 14 de febrero tampoco me doy por aludido. Pero supongo que tenga que ver con la dinámica de la sociedad de cartón piedra. Es lo fácil, ¿no? Que te lo pongan en bandeja un "te quiero". Pero quizás,por esa misma razón, esas palabras ese día no valen nada.
Mientras, no me molestaré ni en arrancar una rosa de ninguna rotonda.
Un abrazo
Exacto. Hay otros 364 días para pronunciar esas palabras. ¡14 euros! En mi caso, opté por un clavel... mucho más económico ;-)
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